El oído humano es un órgano muy sensible que nos permite percibir e interpretar las ondas del sonido en un amplio rango de frecuencias (20 a 20.000 Hz). Es un papel importante en la comunicación y en el equilibrio del cuerpo. EL oído esta constituido básicamente de tres partes principales:
Oído externo: Incluye el pabellón auricular, el conducto auditivo externo y la membrana timpánica. El oído externo es responsable de captar los sonidos que provienen del medio ambiente y llevarlos al oído medio.
Oído medio: En esta parte se encuentran los tres huesos más pequeños del cuerpo humano, martillo, yunque y estribo. Estos tres osículos están conectados a la membrana timpánica y el oído interno, transmitiendo las vibraciones.
Oído interno: En el oído interno, la cóclea procesa el sonido y los canales semicirculares procesan la información que afecta al equilibrio.