Procesamiento auditivo central, ¿Qué es y cómo tratarlo?

El procesamiento auditivo central, PAC, es la capacidad que tiene el cerebro para usar la información captada a través de los oídos. En otras palabras, es como el cerebro reacciona ante el sonido captado por los oídos y, además, representa las habilidades auditivas desarrolladas desde el nacimiento, como la ubicación sonora y la memorización secuencial de los sonidos e identificación de los mismos.

Algunas personas tienen dificultades para realizar estas habilidades, lo que puede provocar desatención, dificultad para concentrarse, comprender y aprender. Este problema se denomina trastorno del procesamiento auditivo central, DPAC, y puede estar presente en personas con una audición normal o con pérdida auditiva. Los audífonos actúan en la sordera como un «amplificador de sonido«, de modo que el sonido que ya no era detectado o que estaba muy distante pase a ser oído, permitiendo que el cerebro reciba la información sonora. Pero, identificar la dirección, origen o comprensión exacta del tipo de sonido solo es posible cuando la ubicación sonora se procesa correctamente.

La localización sonora

El trastorno del procesamiento auditivo central, relacionado con la localización sonora, ocurre cuando una persona presenta dificultades para localizar de dónde vienen los sonidos, no consiguiendo entender conversaciones en lugares ruidosos. Las personas que sufren este trastorno también tienen dificultades para memorizar secuencias de sonidos presentados, como sucede en reuniones, restaurantes o en conversaciones donde el locutor no está posicionado en el campo de visión del paciente.

Los procesos de la escucha

Escuchar implica una serie de procesos que se desencadenan en nuestro cerebro, permitiendo la interpretación y el análisis de los eventos sonoros. Este proceso involucra las estructuras del sistema nervioso central. Cuando ocurre alguna disfunción o deficiencia en el PAC se puede comprometer la identificación y comprensión de los ruidos y sonidos que nos rodean, impidiéndonos utilizar plenamente todas nuestras habilidades auditivas. De estas podemos destacar: detectar, localizar, discriminar, reconocer y comprender el sonido oído, o es decir, tratar con la información recibida a través de la audición.

Es importante resaltar que tener una buena audición no es siempre suficiente. El proceso que realiza el cerebro es complejo e implica localizar y detectar el alcance y dirección del origen del sonido; reconocerlo, distinguiendo los tipos de sonidos; diferenciarlo percibiendo las similitudes y diferencias en los sonidos verbales; y finalmente comprenderlo. Para eso, es necesario que se de un correcto funcionamiento de la memoria auditiva encargada de secuenciar, organizar y luego ejecutar la información sonora captada.

Tratamiento

El Trastorno del Procesamiento Auditivo, DPAC, y alteración en el proceso de localización sonora, no se consideran enfermedades, sino disfunciones y tienen cura. Si el paciente ha confirmado el DPAC o cualquier alteración relacionada, el tratamiento indicado consiste en un programa de rehabilitación fonoaudiológica a través de entrenamiento y ejercicios específicos para desarrollar las habilidades que están perjudicadas.